Serenata maleva (vals)

Letra de MARIO RADA
Música de Enrique Pedro DELFINO

Intérprete: Ignacio Corsini
«El trovador»
Cassette odeon-emi c.m. 14768

Hablado

Ya suena a lo lejos una murga maleva,
como desgranando sus notas de plata,
es el homenaje que la noche lleva,
hasta la ventana de la paica ingrata.

Con un manto azul de serenidad,
envuelve al suburbio la noche estival,
y la claridad, de la luz lunar,
es manta de plata, el perdido arrabal,
la luz de un farol en la oscuridad,
como un ojo e’ fuego guiña sin cesar,
y el viento al pasar, por el diapasón,
de un alambrado, canta una canción,
que cruza la noche llorando emoción.
Mi dulce amada, quién nuestra dicha robó,
dueña de mi alma, tu fiel ilusión destrozó,

bis

Decí malvada, que pudo más que mi amor,
para que así pagaras, mi querer, con tu traición.

El pobre «gavión», en la oscuridad,
sin luz ni esperanza, canta sin cesar,
tan solo tendrá, para su dolor,
consuelo y olvido, muriendo de amor,
pobre trovador, de oscuro arrabal,
ya nadie en tu noche, una luz pondrá,
a la ingrata cruel, no la esperes mas,
porque su ambición, se dejo arrastrar,
y al suburbio nunca, jamás volverá.