Mendicidad (vals peruano)

Letra de Felipe Pinglo Alva
Música de Felipe Pinglo Alva

Este es otro de los valses peruanos cumbres del Maestro de los Autores
y Compositores del Perú, Felipe Pinglo Alva, quien tiene en su copiosa
produccion musical en genero de vals peruano: El Plebeyo, El Espejo
de mi Vida, Bouquet, El Huerto de mi Amada, Pasion y Odio. La gran
mayoria de sus obras musicales son creadas entre 1926 y y 1936 año de
su desaparicion fisica, no asi en el cariño de su pueblo que siguio
viviendo en su musica y letras llenas de gran contenido social.

Cubierto de harapos, la faz macilenta,
el pobre mendigo limosnea un pan
implorando siempre la bondad ajena
a todos les pide una caridad.
Camina encorbado cual árbol añoso,
es prueba viviente de tanta crueldad
conque el mundo azota a distintos seres
para la ignominia de su bacanal.

Quién es? No se sabe, su ayer es misterio.
De dónde ha venido? Jamás lo dirá
Rayando la aurora sale diariamente
a esperar que el mundo le prodigue el pan:
«Señor, señorita, niño una limosna»
pide con voz llena de angustia mortal
y un «Dios se lo pague» que llega hasta el alma
es el mejor fruto de nuestra bondad.

Tal vez en su infancia gozó de grandezas,
quizás vivió alegre en su pubertad,
hoy, que ya declina su triste existencia
vive, porque vive de la caridad.
Mendigo sin nombre tu tragedia afrenta
a este mundo vano, artero y falaz.
Tú, con tus miserias y con tus harapos
vales más que el oro que el mundo nos da.