La marcha nupcial

Letra de Armando José Tagini
Música de Venancio J. Clauso

(Recitado después de la introducción)

Drama real es este que en verso rememoro
al oir los compases de la Marcha Nupcial.
Mientras Cupido llora sobre un bolsón de oro,
un alma ve esfumarse su fé sentimental…
Ensueños ahogados en torpe ambición…
¡Triunfo del oro sobre el corazón!

(cantando)

Te vi salir del templo con tu flamante esposo,
envuelta en los acordes de la Marcha Nupcial.
Un resplandor de dicha te iluminaba el rostro,
el porte de una reina lucías al andar…
En mi redor, las gentes comentaban tu belleza,
yo sentí mi herido pecho estremecerse de emoción.
Me daba vueltas la cabeza…
¡Y era la angustia del corazón!

¡Dulce tiempo que estás a la distancia!
¡Cuantas ilusiones! ¡Cuantos juramentos!
Tus palabras, tu risa, tu fragancia…
castillos de esperanza barridos por el viento.
Yo era pobre… soñador.. ebrio de luna…
No pude ofrecerte más bien que mi ternura,
vos echaste a una balanza tu hermosura
y el dinero del otro pesó mas.

En lágrimas secretas se ahogaron mis reproches,
oyendo el homenaje de la Marcha Nupcial…
Mire partir tu coche que se perdió en la noche
y huí con mi doliente… profunda soledad…
El eco de la marcha se adentró hasta lo más hondo
de mi ser y aquella noche -febril noche de obsesión-
sonó con ritmo de responso
sobre el cadáver de mi ilusión.