Idolatria (valsecito criollo)

Letra de Nolo López
Música de Oscar Napolitano

Comprendo que tus besos jamás han de ser míos,
comprendo que te quiero con todo el corazón.
No sabes cuánto sufro, mi vida es un tormento
pensando que no puedo ser dueño de tu amor.

Yo quiero que tú sepas lo triste que yo vivo.
De noche, como un niño me pongo hasta a llorar.
Quisiera hallar consuelo, más todo es imposible;
borrarte de mi alma jamás lo he de lograr.

Tus ojos, al mirarme, me llevan al abismo,
y el rojo de tus labios me enciende de pasión.
La seda de tu cuerpo me afiebra y me atormenta,
y el beso que yo ansío me mata de dolor.

Te burlas porque sabes que es necia mi torpeza,
y temes que mi ropa te manche tu esplendor.
En cambio mi pobreza no ofende a tu riqueza:
Los dos somos iguales: Tenemos corazón!

Perdona mi locura, no ves que estoy enfermo?
La fiebre de mis noches me ahora en un dolor…
Mis locos desvaríos se tornan en fantasmas
y sueño con rarezas que enturbian mi razón.

Ya ves a lo que llego, mujer idolatrada,
ya ves que estoy camino a la desolación.
Quién sabe si mañana me encuentres ya con vida,
y en medio de mi pecho la cruz del Redentor.