Derecho viejo (II)

Letra de Gabriel Clausi
Música de Eduardo Arolas

Tango Milonga dedicado al Centro de Estudiantes de Derecho

Tango de mi ciudad, malevo y sensual
canyengue y tristón, color de arrabal,
señor de salón, tenés emoción
de noche porteña.
Vuelve para surgir en danza triunfal
canción sin igual que hace sentir
con tanta pasión en el corazón
su abrazo de amor.

Oigo el cantar de un triste bandoneón,
que llora en su canción la pena de un amor
que nunca pudo ser, por causa de creer
en locos berretines.
Todo pasó, no quiero recordar
el tiempo que se fue,
ya nunca volverá la dicha de tu amor
para poder soñar con vos en mi arrabal.

Qué dulzura hay en tu voz,
che bandoneón con tu chamuyo reo,
tango lindo y querendón, nobleza de arrabal,
amores de otros tiempos…
sigue, sigue to canción
para alegrar esta velada linda,
sueña, sueña bandoneón, que siempre tu canción
está en el corazón.