Tarde gris (III)

Letra de Luis Rubinstein
Música de Juan B. Guido

Compuesto el 17 de junio 1930

Tango
Matriz 5740 18841 B

Grabación con Aguilar, Barbieri y Riverol en las guitarras

Pese al dolor vengo a verte;
Lo supe ayer, que tú estabas tan mal.
te quise odiar y mi pasión fue fuerte
no pude más y vine al hospital.
Por todo el mal que me has hecho
te maldecí con despecho y rencor;
pero después sentí dentro del pecho
mi corazón latir con santo amor
¿Por qué llorás? ¿Acaso mi presencia
junto al dolor también a vos te apena?
¿O al recordar tu vida sin decencia
te arrepentiste y hoy querés ser buena?
La tarde gris, tan gris como mi pena,
acompañó mi quebranto por tu herida,
porque eras vos la dicha de mi vida
y el ansia de cantar; y la ley de mi fe.
Nada quiero reprocharte,
todo pasó y prefiero olvidar,
que le he de hacer si nací para quererte
si fuistes (sic) vos la luz de mi soñar.
Yo te perdono y te brindo
pasión, hogar, mi ternura y mi fe
tu alegrarás mi * lindo
yo seré feliz con tu querer
¿Por qué llorás? ¿Acaso mi presencia
junto al dolor también a vos te apena?
¿O al recordar tu huida sin decencia
te arrepentiste y hoy querés ser buena?
La tarde gris, tan gris como mi pena,
acompañó mi quebranto por tu herida,
porque eras vos la dicha de mi vida
y el ansia de cantar y la ley de mi fe.

* no he sido capaz de entender lo que dice Gardel.